Andaba yo con mis recorridos blogueriles tan feliz y contenta, evitando el momento de enfrentarme con el caos de mi casa (no, el gato no), cuando pasando por donde Milena empecé a leer sobre la fidelidad.
Para cada persona la fidelidad es algo distinto, en mi caso la fidelidad y qué conlleva viene definida por mi pareja del momento. He tenido relaciones muy abiertas y otras más restrictivas, pero creo que lo básico es establecer desde el principio en la pareja la definición de la fidelidad.
Alguno consideraba fidelidad que le quisiera a él, lo que me dejaba libertad para hacer lo que me daba la gana si llegaba a apetecerme siempre que no dejara de quererle. Otro se me echó a llorar sólo de pensar en que me fuese a patinar con mis compañeros de clase, así que me reprimí hasta de mantener un gran número de relaciones sociales. Ahora me piden la fidelidad clásica con algún punto celoso. Y no me sienta mal, después de "disfrutar" la casi completa libertad, me gustan los límites, moverme dentro de ellos, estoy muy a gusto y muy feliz. No me implica ningún sacrificio porque no me exigen sacrificios, sólo ciertas dosis de autocontrol y de controlar a otros.
Creo que la fidelidad debemos marcarla juntos, y si no se está de acuerdo en los límites buscar a otra persona que sí lo esté o alguno será desgraciado. Pero marcar los límites para saltárselos después es un engaño y destrozas la confianza de la relación. Aparte de una hipocresía, si no te convencen los límites... pues negocia unos más a tu gusto si consideras que la otra persona merece la pena o rompe y establece unos nuevos la siguiente vez.
04 mayo 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
Juas, parece que el mundo del blog esta algo revuelto con el tema de los cuernos . Pienso que cada pareja es un mundo aparte. También he tenido relacciones donde no importaba demasiado y otras donde algo mal llamado fidelidad llevada al extremo (hasta el punto de no salir de casa) se cargo dicha relacción (entre otras cosas). Pero vamos, ahora no soy alguien a quien hacer mucho caso. Ahora... ave que vuela, a la cazuela. Bueno, seguiremos buscando por ahí a ver que hay más.
Un Beso
Edu
No, si a mí los cuernos no me preocupan en estos momentos, es más lo de intentar imponer una visión sobre la fidelidad lo que me pone los pelos de punta. Unos tan liberales, otros tan "conservadores", mientras los dos estén de acuerdo y a gusto... lo demás no importa :)
Un besote muy fuerte Edu :*
¿A patinar? ¡Qué degeneración!
Yo estoy contigo. Infidelidad es saltarse el acuerdo al que hayas llegado dentro de tu pareja, sea el que sea. Y para unas parejas eso es dormir acompanyado de otro, para otras besasrse, para otras acostarse, para otras enamorarse... el caso es cargarte o no la confianza, supongo.
Publicar un comentario