Para las letras del abecedario

Lo dejo por aqui porque me voy a hartar a repetirlo si no lo hago.
Durante el tiempo que dura una relación uno debe fijarse en las ilusiones y las reacciones que se dan durante ésta. Si la persona que tienes al lado es fría, no hace esfuerzos por ti, no te da ni un mínimo de ilusión por comenzar otro día o te resulta un desconocido con el que de vez en cuando mantienes una charla... malo. Eso ocurre cuando te conformas, cuando las cosas te dan un poco igual, cuando habéis dejado morir lo bonito que podía haber. No digo que sea culpa de uno sólo, pero si eres tú el que se da cuenta y quieres evitarlo y al otro le da igual...
Cuando quieres mucho a alguien sueles hacer tonterías. Como esperar que cambie, que sé dé cuenta, mantenerte allí, a la espera. Ilusionarte cada mucho, cuando de repente tenéis una buena charla, con sentimientos y todo, que hace que esperes más al día siguiente. Pero vuelves a tener al hombre apatía contigo.
La gente suele reaccionar tarde y mal. No reacciona cuando "acaba" la relación porque saben que en el fondo sigues esperándoles. Lo hacen cuando se dan cuenta de que te están perdiendo de verdad. Cuando ya no te preocupas por ellos, cuando ya no les llamas como antes, cuando dejas de estar ahí para cuando ellos tengan a bien mostrar sentimientos. Eso suele coincidir con que otra persona está tomando un lugar en tu corazón, les entra el síndrome del perro del hortelano, ni comen ni dejan comer. Se muestran como nunca habían sido, cariñosos, románticos, preocupados, amables... Pero eso es un espejismo, lo hacen por seguir teniéndote ahí.
La realidad es que no lucharon cuando debían, sino cuando habían perdido, pero el cariño permanece y hace que nos confundamos, que creamos que estamos cometiendo una equivocación. Pero no es así, lo que has elegido es seguir viviendo con ilusión.
Que nadie te lo quite niña.