Empezamos otro añito nuevecito. Con sólo dos días celebramos el 31 cumpleaños de mi hermanito mayor, que nos ha dado de comer en su casita (cosa de agradecer porque después de las vacaciones nuestra nevera está vacía). Estas semanas anduve haciendo kilómetros por tierra peninsulares, empezando las vacaciones con IBERIA el 23 de diciembre al más puro estilo Air Madrid:
En un primer momento pensábamos llevarnos a los peludos con nosotros, pero visto como come la peque y que facturaban 6€ el kilo de perro nos decantamos por dejarlos en una guardería canina (Residencia Tagoro en Tacoronte, la recomiendo, muy simpáticos y se les nota que les gustan los perros) que salía más rentable. Fue una sabia eleccion, porque nuestro precioso vuelo rumbo a Sevilla sufrió un retraso previsto en unas 7 horas con cambio de aeropuerto de norte a sur por cierre a las 23 del de Los Rodeos. No quiero ni imaginar lo que podría ser eso para dos perros encerrados en un transportín y rodeados de maletas. Total, como los perros no venían y nuestro destino final era Madrid (compramos para Sevilla para dejar el transportín, na más) conseguimos darle penita a la encargada y que nos metieran en el siguiente vuelo a la capital del Reino. En fin, que llegamos a Madrid unas horas antes de lo previsto en el itinerario original.
Me quedé varios días por allí, disfrutando de las calefacciones a 30 grados Celsius y las calles con algunos menos, para trasladarme después de reuniones familiares varias a la provincia de Burgos, concretamente a un pueblecito pequeñito cercano a Covarrubias.
Al día siguiente confirmé el ahorro que supone la compra de un GPS con mapa de radares cuando bajamos a Sevilla en coche. No pude disfrutar mucho de la ciudad, no tenía la bici a punto, pero mi familia política me trató como a una princesa y hasta me compraron cerezas para mí solita. El 31 celebramos la llegada de una nueva tradición navideña con San Silvestre, ya que no podíamos esperar la llegada de sus Altezas Reales. El buen hombre me trajo todo lo que le había pedido en la carta a los 3 de oriente y alguna cosita más que me gustó mucho, en parte por mi falta de vergüenza en casa y en parte porque llevaba alguna copita de más "para subir la tension", como dijo mi suegro cada vez que me llenó la copa. Hay fotos pero, como pueden comprender, no pienso exhibirlas.
Ayer regresamos puntualmente con IBERIA, mi hermano y mi cuñada recogieron a los peques mientras nosotros hicimos lo propio con las maletas y llegamos casi a la vez a casa. Los resultados de 10 días en la guardería son notables: no hay manera de conseguir que los perros no se coman el pienso del otro, Eme está irremediablemente con el modo sociable por las orejas, saltando encima y lamiendo a cualquier persona que la mire fijamente durante más de dos segundos, pero Coco no ha superado su fijación enfermiza por las pelotas.
Hemos vuelto al trabajo, no nos tocó la lotería ya que no compramos ni un décimo y tampoco nos tocó el Euromillón que sí que compramos cada semana. Y como yo siempre voy a lo mío, dejo tarde la postal navideña del año pasado.
02 enero 2007
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5 comentarios:
Prime!!!
que caos lo de los aeropuertos, siempre estan igual de mal, brrr
por cierto tampoco juego a la lotería. Puedes decir que te ha tocado el reintegro. En fin de cuentas el resultado es lo mismo, no?
Pues los chuchines están lustrosos...
"anduve"
Thankius anónimo, corregido y avergonzada :D
_lo de los aeropuertos ya es vergonzoso, nos torean como quieren y las reclamaciones son un coñazo y más tiempo que nos hacen perder...
_en fins, feliz año cattz
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